Esta semana hemos sido testigos de la agresión sufrida al presidente del gobierno Mariano Rajoy en Pontevedra durante un paseo electoral. Un joven de 17 años se acercó a Rajoy mostrando la intención de hacerse un selfie junto a él, cuando este le asestó un fuerte puñetazo. (ver vídeo)
Tras algunas investigaciones, se han identificado mensajes amenazantes en la cuenta personal del agresor. De este modo, se pueden apreciar diversas muestras que responden a las distintas categorías de discurso violento y de odio.
En este sentido, el perfil del agresor muestra una actividad alta, especialmente centrada en el retuiteo de otros mensajes. Junto con su foto de perfil y apodo «capitan», el menor se describe en su biografía como «GRANATATE. El sistema no te educa te miente. GALIZIA CEIVE. M*G. Antifeixista». Con cerca de 3.000 seguidores, el joven publica mensajes con habitualidad, en los que, además de describir actividades de su día a día, expresa opiniones centradas en el fútbol y en la política.
Llevando a cabo un análisis más específico de aquellos mensajes que resultan de interés por su carga violenta, vemos que, en primer lugar, muestra en diversas ocasiones un lenguaje violento mediante el que expresa su desacuerdo con ciertos grupos, personas o acontecimientos:
Se observa por tanto que no sólo utiliza expresiones de mal gusto, sino que además lleva a cabo amenazas de muerte que parecen ir dirigidas hacia su profesora de lengua.
En el mismo sentido, amenaza también al periodista Eduardo Inda con matarle: «Eduardo inda te voi a meter yn tiro en la nuca (sic)».
Por otro lado, el perfil muestra como el menor hace alarde en distintas ocasiones de un lenguaje violento en el que desea el mal de otros, «ojala q te den un tiro (sic)», «sionistas, mercenarios hijos de puta sois lo peor de la humanidad hojala que os cojan a todos y os torturen sin piedad hasta que enlocezais (sic)», del mismo modo que emplea expresiones de mal gusto tales como «Me la sopla quien gane q les den por culo igual a los dos puta barsa madrilistas hijos de puta (sic)».
El pasado 14 de diciembre del 2014 publicaba en Twitter «Voi a hacer un atentado en sede del PP (sic)»
Se observa como, en esta línea, todas estas amenazas cobran sentido una vez se ha e fectuado la agresión física. De esta forma, el propio agresor se veía reforzado a llevar a cabo la agresión a través de un grupo de WhatsApp en la que sus amigos le provocaban y proponían de forma directa «Capi matalo», «Los pulgares en los ojos», «Y escúpele en las cuentas», a lo que el menor zanjó la conversación con un selfie en el que escribía «Ya estoi saliendo (sic)».
Se pueden distinguir, de esta forma, como existen formas de discurso de odio en las categorías que implican la causación de daño físico, bien sea mediante incitación directa a la violenta o bien mediante la forma indirecta, mientras que también se ve acompañado de una comunicación violenta generalizada a lo largo de toda la «conversación» que el menor genera en la red social.